Cómo Comparar Préstamos y Tarjetas usando el CFT
Continuando con el análisis de la Parte 1, donde definimos al Costo Financiero Total (CFT) como el indicador supremo del costo del crédito en Argentina, esta segunda sección se enfoca en la aplicación práctica. En un contexto de alta inflación y dispersión de tasas, saber leer el CFT es la herramienta más potente para defender el bolsillo.
La Regla de Oro: Comparar Peras con Peras
Al evaluar dos o más ofertas de préstamos (por ejemplo, entre un banco tradicional y una fintech), el error más frecuente es comparar las Tasas Nominales (TNA). La regla de oro de la educación financiera en Argentina es: siempre se debe comparar el CFT.
Un banco puede ofrecer una TNA del 80% pero tener gastos administrativos altos que lleven el CFT al 150%. Otra entidad podría ofrecer una TNA del 85% (aparentemente más cara) pero con gastos bonificados, resultando en un CFT del 130%. En este escenario, la opción con la “tasa de interés” más alta es, paradójicamente, la más barata para el bolsillo del cliente.
CFT con IVA vs. CFT sin IVA
En la letra chica de los anuncios, es común ver dos valores de CFT. Para el consumidor final (la mayoría de las personas que solicitan préstamos personales), el número que importa es el CFT con IVA incluido. Este es el porcentaje final que impactará en la cuota. El valor “sin impuestos” es relevante solo para empresas que pueden descargar ese crédito fiscal.
El Impacto de la Inflación: Tasa Real vs. Tasa Nominal
En la economía argentina, el análisis del CFT no puede aislarse de la inflación. Aquí entra en juego el concepto de Tasa Real.
- Tasa Real Negativa: Si el CFT de un préstamo es inferior a la inflación proyectada para el mismo período (y los salarios acompañan esa inflación), se dice que la tasa es negativa en términos reales. En este escenario, la deuda se “licúa”: el valor real de la cuota disminuye con el tiempo frente al poder de compra o los ingresos del deudor.
- Tasa Real Positiva: Si el CFT supera a la inflación, el crédito tiene un costo real. El deudor deberá hacer un esfuerzo mayor para pagar las cuotas.
Conclusión: Exigir Transparencia
Por normativa del Banco Central de la República Argentina (BCRA), todas las entidades están obligadas a informar el CFT en sus publicidades y contratos con una tipografía destacada.
Como consumidores, la responsabilidad radica en buscar activamente este número antes de firmar. No importa cuán baja sea la cuota inicial o cuán atractiva sea la TNA; el CFT es la única verdad matemática sobre cuánto costará devolver el dinero prestado.
